En una reunión de iguales, se anuncia un nuevo diario
El financiamiento provendrá de diversos sectores de la sociedad civil
En una reunión de iguales fue lanzada esta noche la convocatoria pública para la fundación de un diario matutino, mismo que empezará a circular en los próximos meses y cuyo nombre será La Jornada.
En representación de más de setenta periodistas y escritores, Pablo González Casanova, Carlos Payán Velver -director del nuevo diario- y Héctor Aguilar Camín explicaron las razones de esta iniciativa, las características y principios del periódico y la estructura de la sociedad que lo editará.
Después de caracterizar el momento político que vive el país, los oradores del acto, celebrado en el Hotel de México de esta ciudad, señalaron la acusada derechización de los medios informativos a los que, con algunas excepciones, dominan “el conservadurismo ideológico y la estrecha lógica mercantil, cuando no la alianza extranacional”. Dada esa situación, dijeron, es imprescindible un esfuerzo de información y crítica.
Dijo Pablo González Casanova: “No aceptamos el optimismo autoritario ni la esperanza sin pensamiento crítico. La voluntad nacional es necesaria y para ser efectiva tiene que ser lúcida. No aceptamos que con la claridad cunda el desánimo. Eso sólo lo sostienen quienes no quieren claridad”. Carlos Payán sintetizó la “vocación política” de La Jornada
como el ánimo de “estimular la participación de lectores y ciudadanos en favor de causas fundamentales de México”.
El diario se propone, dijo, contribuir a la lucha “por la defensa de la soberanía y la independencia nacional y la solidaridad con las luchas de otros pueblos por hacer realidad esos principios: por el diario ejercicio y el respeto irrestricto a las garantías individuales y sociales que recogen las leyes fundamentales de México; por el compromiso con las necesidades y demandas de los trabajadores del campo y de la ciudad así como de las mayorías marginadas del país: por la democratización de la vida pública, el ensanchamiento de la pluralidad política y el respeto a los derechos legítimos de las diversas minorías, y por la distribución igualitaria de la riqueza socialmente creada y la limitación de privilegios políticos y económicos de toda índole”.
Aguilar Camín explicó la invitación a suscribir títulos de accionistas diciendo que el grupo editor se propone construir “un instrumento de comunicación no subordinado a intereses particulares, sean oficiales o partidarios, ni a las decisiones mercantiles de un puñado de inversionistas”. Se busca, dijo, “una empresa nacida de la sociedad, pagada y financiada con aportaciones de sus individuos, comunidades y asociaciones”.
En una reunión de iguales fue lanzada esta noche la convocatoria pública para la fundación de un diario matutino, mismo que empezará a circular en los próximos meses y cuyo nombre será La Jornada.
En representación de más de setenta periodistas y escritores, Pablo González Casanova, Carlos Payán Velver -director del nuevo diario- y Héctor Aguilar Camín explicaron las razones de esta iniciativa, las características y principios del periódico y la estructura de la sociedad que lo editará.
Después de caracterizar el momento político que vive el país, los oradores del acto, celebrado en el Hotel de México de esta ciudad, señalaron la acusada derechización de los medios informativos a los que, con algunas excepciones, dominan “el conservadurismo ideológico y la estrecha lógica mercantil, cuando no la alianza extranacional”. Dada esa situación, dijeron, es imprescindible un esfuerzo de información y crítica.
Dijo Pablo González Casanova: “No aceptamos el optimismo autoritario ni la esperanza sin pensamiento crítico. La voluntad nacional es necesaria y para ser efectiva tiene que ser lúcida. No aceptamos que con la claridad cunda el desánimo. Eso sólo lo sostienen quienes no quieren claridad”. Carlos Payán sintetizó la “vocación política” de La Jornada
como el ánimo de “estimular la participación de lectores y ciudadanos en favor de causas fundamentales de México”.
El diario se propone, dijo, contribuir a la lucha “por la defensa de la soberanía y la independencia nacional y la solidaridad con las luchas de otros pueblos por hacer realidad esos principios: por el diario ejercicio y el respeto irrestricto a las garantías individuales y sociales que recogen las leyes fundamentales de México; por el compromiso con las necesidades y demandas de los trabajadores del campo y de la ciudad así como de las mayorías marginadas del país: por la democratización de la vida pública, el ensanchamiento de la pluralidad política y el respeto a los derechos legítimos de las diversas minorías, y por la distribución igualitaria de la riqueza socialmente creada y la limitación de privilegios políticos y económicos de toda índole”.
Aguilar Camín explicó la invitación a suscribir títulos de accionistas diciendo que el grupo editor se propone construir “un instrumento de comunicación no subordinado a intereses particulares, sean oficiales o partidarios, ni a las decisiones mercantiles de un puñado de inversionistas”. Se busca, dijo, “una empresa nacida de la sociedad, pagada y financiada con aportaciones de sus individuos, comunidades y asociaciones”.
0 comentarios:
Publicar un comentario