El cónsul de prensa y cultura de Estados Unidos en Guadalajara, observa preocupante que el incremento de la violencia en México dañe las libertades conseguidas hace 200 años.
Por Alonso Sánchez y Aarón Estrada.
A 9 años de la caída de las Torres Gemelas en Nueva York, que marcaron el inicio del siglo XXI, para la sociedad Norteamericana recordar estos atentados es un “momento de reflexión, no solamente de nuestro error, sino también de cómo actuamos dentro de una sociedad global, para mejorar las libertades de nuestros países, sin hablar de política o religión, lo cuales unos como diferencia puede tener”, afirmó Christopher Teal, cónsul de prensa y cultura de Estados Unidos de Norte América en Guadalajara, en entrevista concedida justamente el pasado sábado 11 de septiembre, previó a su participación en las primeras Jornadas de Actualización de Periodismo que se efectuaron en Casa del Arte del Centro Universitario del Sur con sede en Zapotlán el Grande. El cónsul, quien también cumple el rol de vocero del gobierno estadounidense en seis estados de la república mexicana, aclaró que el inicio de la guerra en medio oriente, en Afganistán –la cual se desató con motivo de los atentados del 11 de septiembre (11/S) en Nueva York- “no tenía nada que ver con religión, ni creencias”, sino que fue en repuesta contra un ataque sufrido a los Estados Unidos por un régimen dictatorial que “se tenía en el gobierno de Afganistán, en aquél tiempo, que ni siquiera daba oportunidad para que las niñas fueran a la escuela, ni siquiera daba otros derechos fundamentales posibles a la mayoría de la población de otros países”.
Después de la caída de las Torres Gemelas, ¿Qué es lo que ha cambiado para bien o para mal en la sociedad norteamericana, en cómo se ve hacía el mundo?
- Lo que ahora vemos, después de 9 años del 11/S es, una organización dentro de la comunidad global de esta amenaza del terrorismo, tenemos aliados trabajando con nosotros, en todo el mundo para fortalecer democracias, fortalecer derechos fundamentales de gente, es una señal de que ahora no podemos decir, este rincón del mundo no importa, o esta parte sí. Todas las partes son importantes y tenemos que seguir trabajando, colaborando, mejorando, tenemos que trabajar entre países, con la comunidad de democracias de cada parte del mundo.
Estos hechos afectaron demasiado la cuestión migratoria. Sobre todo en los esfuerzos previos al 11/S para dar estatus legales a indocumentados que tiene viviendo años en Estados Unidos, posterior a ello hubo una pausa y después se hicieron más estrictas las leyes norteamericanas en ese sentido, vemos el caso de la Ley Arizona, ¿Después de este contexto, cuál es la postura actual del gobierno de Barack Obama, en el tema migratorio?
-Sobre todo con esta ley Arizona, hay una llamada muy clara de la necesidad de hacer una reforma migratoria, las respuesta de unos fue esa ley, el gobierno federal por su parte llevo este caso a la corte federal, diciendo que no es constitucional, que un estado dentr
o de una república cree una ley federal y tome acciones federales, la juez hasta el momento está de acuerdo, solamente ha dicho que una gran parte de la ley no es constitucional, entonces no va aplicar ya, hemos superado esta parte. Pero existe todavía este problema, que hay más 11 millones de personas viviendo de manera ilegal entonces lo que el gobierno federal tiene que hacer y es parte de un debate que está en el congreso de Estados Unidos es el cómo vamos a tratar esta gente, algunas han vivido décadas en EU, tienen niños, hay que reconocer que si hay una demanda para su labor, somos un país de migrantes, pero obviamente a través de los años ha dejado este hueco (legal) y obviamente con el paso del tiempo hemos visto una demanda de cambios en la situación domestica de los Estados Unidos, el presidente está firmemente apoyando esta reforma.
Por otra parte, es el asunto de la inseguridad en la frontera norte de México, hemos escuchado mucho de la parte oficial de EU, del apoyo económico que existe hacía la guerra del gobierno mexicano contra el crimen organizado pero ¿cuál es la postura del ciudadano estadounidense, cómo ven el panorama actual?
-Creo que mucho de la razón de hacer leyes como la SB1070 en Arizona, fue un poco por el miedo de la inseguridad que vemos por este lado de la frontera sur, creo que hay muchos perjuicios en los Estados Unidos como los que hay aquí y está pasando en cada lado de la frontera. Hay mucho miedo de que la inseguridad que vemos en los estados del norte de México, pueda darse una situación similar en los estados del sur de Norteamérica. No hemos visto un aumento de la violencia, ni criminalidad hasta el momento (en EU), pero sigue habiendo mucho miedo y el tráfico sigue siendo más de un millón de personas cruzan la frontera de una manera ilegal cada día, eso es impresionante.
¿Qué hay de la ley Mérida y otros apoyos binacionales?
- México sigue siendo un socio muy fuerte para Estados Unidos en los negocios. Pero es preocupante ver sobre todo el nivel de violencia en muchos estados de la república mexicana. En eso queremos apoyar, hay mucho que podemos hacer, el presidente ha hecho un proyecto de ley, en el congreso para que más de 300 millones de dólares apoyen la lucha, colocar más agentes en la frontera y por primera vez estamos viendo agentes de las aduanas de Estados Unidos verificando qué están haciendo. Por primera vez en la historia tenemos una responsabilidad de apoyar y los estamos haciendo.
A 200 años del inicio de nuestra independencia y sobre todo con la historia que nos liga con Estados Unidos ¿Qué representa para un cónsul estar presente en México en estas celebraciones?
- Es un gusto, un honor estar aquí durante las fiestas patrias. Tener 200 años de libertad es algo impresionante, vemos varios países del hemisferio celebrando y para nosotros es un gusto ver todo lo que ha cambiado para bien o para mal. Pero en cada país es diferente, cada país tiene su historia, sus retos y lo que vemos 200 años después de la independencia, en México, es un país con mucho poder, mucho liderazgo, mucho desarrollo, e instituciones a pesar de los retos que tienen, sí funcionan. Sí hay una democracia aquí, sí hay un comercio, sí hay libertad de expresión. Lo que nos preocupa, son que estos hechos de violencia puedan dañar esa libertad de expresión, esas libertades básicas conseguidas que le han costado a México 200 años. Por eso es muy importante que ustedes como periodistas sigan en esta lucha, alguien tiene que dar voz a la gente y el rol de los periodistas es hacerlo, para nosotros ver esos esfuerzos sobre todo en el año del bicentenario son muy importantes.